Tener una mascota en casa puede tener muchas ventajas y beneficios para los niños, sin embargo, hay que ser conscientes de los cuidados y necesidades de los animales, ya que no son un juguete. La decisión de tener una mascota es seria y deben tomarlas los adultos puesto que un niño no tiene el criterio ni la madurez para hacerlo.  Siempre se debe adquirir una mascota pensando en que el mismo se volverá parte de la familia y como tal recibirá todo el tiempo y amor de parte de todos sus miembros.

¿Cuáles son las ventajas para los niños de tener una mascota?

  • Un amigo fiel con el que jugar y al quien cuidar y de esta manera familiarizarse con las funciones naturales de los seres vivos.
  • Aprender a respetar a los animales en general y conocer sobre valores relacionados con respeto, responsabilidad, empatía, amor, compasión y fidelidad.
  • Asignar tareas relacionadas con el cuidado de la mascota, les da a los niños sentido de responsabilidad y pertenencia.
  • Está demostrado que los niños que conviven con animales tienen un riesgo menor de sufrir alergias.
  • Mejora su estado de ánimo, estimula los sentidos del niño, desarrolla la empatía, les eleva la autoestima y la integración social. En general lo niños que tienen mascotas son sociables y al relacionarse con otro ser vivo les ayuda a desarrollar su capacidad de intuición.
  • El solo hecho de acariciar a un animal hace que el cuerpo libere endorfinas reduciendo el estrés y la ansiedad. De hecho, hay terapias asistidas con animales para liberar el estrés.
  • Fomenta su salud ya que, en el caso de los perros, cuando se sacan a pasear se suele correr y jugar activamente con ellos.
  • Causa de alegría entre la familia ya que las mascotas son parte de la familia y sólo por eso, es motivo de alegría y felicidad.
  • Alivia la ansiedad por separación, cuando las mascotas están en casa pueden ayudar a aliviar la ansiedad por separación en los niños cuando mamá o papá no están en casa.

¿Cuáles son las mejores mascotas para niños?

La elección de una mascota depende de lo que la familia desee.

Hay aspectos que considerar como el espacio, el tiempo disponible para hacerse cargo, el presupuesto, la edad de los niños y el carácter del animal que se integrara a la familia.

Entre las mejores mascotas para los niños están: los perros, gatos, hámster, los conejos y los peces.

Perro:

Es la mascota de preferencia.  La mayoría de los niños si tuvieran la posibilidad de elegir no lo dudarían y se decidirían por estos amigos del hombre.

Un perro se puede sacar a pasear, cepillarlo, jugar con ellos, ponerles la comida, ponerles ropita etc.

Es uno de los animales más sociables que hay, buscan y les gusta la compañía humana.  Por otro lado, son fáciles de adiestrar y pueden aprender trucos, lo cual es una gran diversión para un niño.

Si se opta por un perro, es preferible que sea un perro grande o por lo menos tamaño medio. Los perros muy pequeños son frágiles y el manejo de los niños es un poco brusco cuando intenta cogerlo o jugar con él. Además, las razas pequeñas suelen huir de los niños (no en todos los casos) pero si muchas veces se atemorizan de que se les hagan daño por el trato brusco.

El perro es uno de los animales que más cuidados necesita.

  • Necesitan salir varias veces al día de la casa.
  • El gasto económico es mayor que otros animales.
  • No pueden pasar mucho tiempo solos por lo cual son bastantes dependientes del dueño.
  • Es necesario cepillarlos y bañarlos regularmente, sobre todo aquellos que tienen el pelo largo.
  • Sus visitas al veterinario son más frecuentes que cualquier otro animal.

Gatos:

Por otro lado, tenemos a los gatos los cuales no requieren de tantos cuidados como los perros y por ello, muchas familias se inclinan hacia estos animales.  Sin embargo, algunos no consideran que los gatos sean las mascotas más recomendadas para los niños.

Los gatos pueden ser cariñosos y buscan la compañía de sus dueños. Pero son animales más independientes. Hay que tratarlos de forma suave y con respeto. Cuando los gatos no quieren jugar no hay que insistir y no toleran el trato brusco.  Pero si el niño es suave y delicado y es capaz de comprender el carácter de los gatos, estos pueden convertirse en una buena mascota.

Conejo:

El conejo se ha puesto de moda en los últimos años y ha sido una opción para muchas familias.

Puede vivir en jaula y no necesita mucho espacio. Sin embargo, es recomendable sacarlo a diario para que juegue y corretee un poco por la casa o jardín. Se le puede acariciar y tomar en brazos, son animales cariñosos.

Peces:

Este es un animal fácil de cuidar y mantener. Es una buena opción para ir introduciendo a tu hijo en el mundo de los animales he ir midiendo su sentido de responsabilidad.

Hay muchísima variedad de peces en colores y formas. Pero para los niños pequeños el más común es el pez beta, que puede vivir solo y es muy llamativo.

Hamster

Son animales pequeños y viven en jaulas. No requieren de muchos cuidados y puede ser una buena opción como primera mascota del niño. Así aprenderá a ser responsable alimentando y limpiándolo.

Son animales curiosos, inteligentes y juguetones. Fáciles de manipular y son perfectos para pisos o apartamentos pequeños.

Son de fácil reproducción, por esta razón es recomendable que compres solo uno, o que sean del mismo sexo.

¿Cuál es la edad adecuada para que un niño tenga una mascota?

Se considera la edad óptima para que un niño tenga una mascota a los 3 años ya que antes los niños son incapaces de ser responsables del cuidado de un animal.  Pero se les puede comenzar a enseñar.

A partir de los 4 años, el niño ya podrá ocuparse de algunas tareas, como ponerles la comida o limpiar la jaula o zona del animal. A esta edad, el hámster y los peces pueden ser una buena opción, ya que requieren pocos cuidados.

Si la mascota deseada es un perro, es mejor esperar hasta que tenga por lo menos 6 años. A esta edad ya pueden hacerse cargo de más tareas relacionadas con el cuidado del animal.

Sea cual sea el animal que escojas para tener en casa lo más importante es que será un compañero que acompañe a nuestro hijo en su desarrollo.

 

Editores PP