Mi historia

Hola soy Eva  Quinzada Espino y tengo el gusto de contar mi historia la cual para mí tuvo el final perfecto y fue  el nacimiento de mi hijo Eric Abraham Santamaría Quinzada en el año 2011.

Abro mi corazón a ustedes y les digo a todos sin duda, que este ha sido el mejor rol que la vida me dio ser mamá”.

Sé, que no es el caso de todas la parejas que pasan por problemas de infertilidad como nosotros, lo que sí es cierto es que la vida me ha enseñado que todos tenemos un propósito y que no importa cuál sea debemos buscar el camino a la felicidad.

Mi historia, comenzó en el 2004 cuándo me casé y este matrimonio vino con la ilusión de tener hijos casi inmediatamente,  ya que por mí edad queríamos comenzar temprano decíamos nosotros, pero los planes de Dios eran diferentes y no iban alineados con la realidad que mi esposo y yo soñábamos en ese momento.

Queríamos hacer todo en el orden perfecto y basado en nuestros planes,  nuestro orden y muchas veces sintiéndonos presionados por la sociedad quien también suele empujar a las parejas a que todo tiene que suceder en un orden específico, y además enfrentarnos a la poca empatía de la gente.

Buscando posibilidades

Una vez mi esposo y yo decidimos buscar bebés, tratamos de documentarnos un poco en el tema e ir directo a algún ginecólogo que manejara el tema de infertilidad para descartar en cualquier caso algún problema, porque a los 34 años sentíamos que era mejor atacar cualquier tema de una forma rápida.

Así lo hicimos, y fui detectada inicialmente con endometriosis.  De este día en adelante empezamos hacernos una serie de exámenes para saber cómo atacar el problema.   Con el primer doctor que visitamos me realicé muchísimos exámenes y procedimientos terminando en 1 operación, 4 inseminaciones y 3 In Vitro fallidos.

En este ir y venir pasaron 5 años de desgaste físico y mental y definitivamente pérdida de confianza y de esperanza en todo.   De esta experiencia pude rescatar algo súper importante y que se los dejo como recomendación, siempre debe existir química y confianza con la persona que te trate en este proceso, cuando pierdes la confianza es momento de refrescarte y buscar alguien que te la devuelva porque la parte anímica juega un papel fundamental.

Por recomendación de una amiga, hicimos un cambio y busque por decirlo de alguna manera otra opinión pero realmente encontré más de lo mismo con un In vitro más fallido.

En ese momento mi esposo y yo, decidimos parar un rato y despejarnos antes de tomar una nueva decisión no negare que teníamos momentos de tristeza, de duda de incertidumbre y lo peor donde cuestionaba mucho mi destino y los planes el creador tenía para nosotros.  En este camino conocí mucha gente y me incliné mucho por llenar mi vida espiritual porque sentía que tenía un vacío y en muchos sentidos sentí que Dios me enviaba el mensaje correcto que era CONFIA, pero seguía tropezándome por no entender los planes que tenía para mí.

Para Dios no hay imposibles

En esta desesperación me tocó conocer a una persona que, a pesar, que dio una estocada muy fuerte en mi corazón y en mis esperanzas, sin él saberlo su doloroso comentario me ayudo a seguir otros caminos.   Este doctor, después de hacerme una serie de exámenes me diagnosticó como una persona infértil con cero posibilidades de quedar embarazada, que solo había un pequeño porcentaje de que lo podría lograr con una operación, sino lo hacía no habría oportunidad alguna que eso pasara.  Nunca olvidaré ese día dónde mí esposo agarró mí mano y gentilmente le dimos las gracias y nos retiramos de su consultorio.   Ambos sin hablarnos sentíamos exactamente lo mismo y pensábamos exactamente lo mismo.  Mi esposo fue mí roca en todo este tiempo sin su amor y su comprensión estoy segura que no hubiese logrado mantenerme en pie.  Y me detengo aquí para decirles que la comunicación y las expectativas de los que ambos quieren como pareja deben tenerlas claras sino se hace muy difícil el proceso.

Cuando sientas que sea el momento hay que soltar y confiar en tu destino

A partir de esta decisión empecé a liberar mi corazón de la angustia y del estrés y me deje llevar por el plan de Dios.  En realidad, ya no pensaba en tratamientos, no me cuestionaba y deje de pensar tanto en el ¿Por qué? y me concentre en el que quería Dios de nosotros y deje de hablar para empezar a escuchar.

Es así, como meses después de un tiempo nos dijimos ¿Por qué no adoptar? es además de algo que queríamos, una acción hermosa amar a una persona que tanto lo necesita y que entrara a nuestro hogar donde teníamos tanto que dar.

Siempre hay una nueva posibilidad solo hay que darle la vuelta

En ese caminar contactamos a la muy recomendada abogada en temas de adopción la Lic. Celia Jean François quien nos empezó a guiar con todo lo referente a este mundo tan extenso que en realidad desconocíamos.   Yo me sentía feliz solo de escuchar que había alguna posibilidad de poder hacerlo aunque tomara tiempo.  Recomendación, es súper importante encontrar personas que estén en la rama de familia y que te puedan guiar en la parte legal porque no es fácil el proceso pero tampoco es imposible y más cuando uno tiene las ganas.

Mientras reuníamos la información para el proceso mi mente dejo de aferrarse a lo que no podía ser y cambie a tenemos una posibilidad.

 

 

Un final feliz…

Unos meses después mis dos grandes amigas Edda López y Tania Pérez vieron algo raro en mí  y me dijeron que podría estar embarazada, por supuesto que mi reacción fue un Nooooo rotundo, pero siempre les agradeceré que casi me obligaron a realizarme una prueba de embarazo; honestamente allí me jugaron en contra todos los sentimientos porque no quería caer en sufrimientos y tristezas nuevamente y les dije que quería esperar un tiempo,  pero fue tanta la insistencia que tuve que ir a comprar una prueba y al aplicarla resulto positiva Yay!, pero seguía en negación cuando llamé a mi esposo para comentarle me dijo no puede ser vamos a un Clínica mejor y es así como fuimos a una clínica donde entregaban los resultado de inmediato, nunca se me olvidara eran las 9:00p.m.  y cuando nos dan los resultados decidimos ir al Santísimo para abrir la prueba delante del altar y el resultado fue CONFIAR EN EL PLAN DE DIOS siempre será “POSITIVO”  .

Mensaje final y lo que Dios me manda a decirte

Nuestro más grande regalo es un niño sano que ya tiene nueve años y que lo buscamos por casi 8 años pero nuestro momento era ese no antes, no después, no a nuestro tiempo  es simplemente cuando debió ser para nosotros.

A las parejas que se sienten desesperanzadas siempre habrá una respuesta en la medicina, en la adopción o en la aceptación de lo que el señor tiene para  cada uno es nuestro camino a emprender. Soltemos nuestros planes, ten fe y deja que Dios actué  y te ayude a  escribir tu historia y te aseguro será lo mejor que puedas experimentar.

Con cariño de mí para ustedes.

 

Eva Quinzada Espino